Jesucristo Señor de nuestra vida sexual 07/08/22 #1208

Episode 219,   Aug 07, 2022, 08:28 PM

Pastor José Luis Cinalli
07/08/22

Jesucristo Señor de nuestra vida sexual

Uno de los pecados más desenfrenados y difíciles de confesar es el sexual y también uno de los más destructivos. Sin embargo, si alguien quiere ser un instrumento efectivo para Dios tendrá que rendir su sexualidad al señorío de Cristo. Como dijo Martín Lutero: “Nunca he conocido a un hombre (o mujer) usado por Dios poderosamente que no tenga a Jesucristo como Señor de su vida sexual”. La epidemia de fracaso moral ha producido familias sin presencia. Bata ya. Dios nos está llamando a todos a adoptar una política de tolerancia cero hacia la pornografía y al pecado sexual. Solo cuando estamos revestidos del Espíritu Santo Dios sella “santo” cada área de nuestra vida y cada órgano de nuestro cuerpo. Aprende esta lección: ¡existe una relación directa entre inmoralidad sexual y una vida de oración reducida! Es imposible tener las dos. Por tal motivo no descuides nunca el tesoro más grande que posees: ¡tu relación con Dios! Ama a Dios y rechaza el pecado como si escupieras leche agria. Santifícate y prepara un ambiente propicio, antiséptico donde el Espíritu Santo lleve a cabo una cirugía profunda en tu corazón. Deja que tome la espada de dos filos y corte lo que en tu vida no pertenece a Dios.  

Ahora bien, la gente piensa que la Biblia no habla de sexo o que la Biblia está en contra del sexo. La verdad es que la Biblia está a favor del sexo: Bebe el agua de tu propio pozo, comparte tu amor sólo con tu esposa. ¿Para qué derramar por las calles el agua de tus manantiales teniendo sexo con cualquiera? Deben reservarla sólo para los dos; jamás la compartan con desconocidos. Que tu esposa sea una fuente de bendición para ti. Alégrate con la esposa de tu juventud. Es una cierva amorosa, una gacela llena de gracia. Que sus pechos te satisfagan siempre. Que siempre seas cautivado por su amor”, Proverbios 5:15-19 (NTV). El sexo no solo está permitido en el matrimonio sino que es un mandamiento: “Bebe el agua de tu propio pozo…”, Proverbios 5:15 (NTV). Esta expresión es una ilustración de la fidelidad en el matrimonio. En tiempos bíblicos los hombres tenían su propia cisterna de donde sacaban agua para su uso, 2º Reyes 18:31. Se consideraba un crimen robar agua de un pozo ajeno, así como era un crimen tener relaciones sexuales con la mujer de otro hombre. En ambos casos el ofensor ponía en peligro su vida y la seguridad de toda su familia. Del mismo modo hoy en día un hombre casado debe estar contento con su esposa y no ‘robar agua de otra cisterna’. “Si quieres disfrutar del amor, disfrútalo con tu esposa”, Proverbios 5:15 (TLA). “… El esposo y la esposa deben ser fieles el uno al otro, porque Dios castigará a los que tengan relaciones sexuales prohibidas y sean infieles en el matrimonio”, Hebreos 13:4 (TLA). El apóstol Pablo fue más enfático todavía: “… El hombre debe satisfacer los derechos conyugales de su esposa, y lo mismo la esposa hacia su esposo… No se nieguen… a menos que se pongan de acuerdo en no ejercerlos durante un período de tiempo definido para dedicarse… a la oración… Luego únanse de nuevo para evitar que… Satanás los tiente, 1ª Corintios 7:3-5 (NT-BAD). 

Además, el sexo es un gozo, un deleite: “… Que su amor y sus caricias te hagan siempre feliz… Que sus senos te satisfagan por completo, que su amor te apasione para siempre”, Proverbios 5:19 (TLA, PDT). Dios no tuvo la intención de que la fidelidad en el matrimonio fuera algo aburrido o monótono. Al contrario. Las relaciones sexuales son un regalo que Dios da a la gente casada para su satisfacción mutua. Solo dentro de esa relación de compromiso permanente se encuentra la verdadera satisfacción. ¿Lo ves? El sexo es una bendición pero ¡solo en el matrimonio! “… Sé feliz con tu esposa, disfruta a la mujer con la que te casaste...”, Proverbios 5:18 (PDT). “¡Bendita sea tu fuente! ¡Goza con la esposa de tu juventud!”, Proverbios 5:18 (NVI). La palabra bendición es estar muy feliz. Significa tener una profunda satisfacción física, emocional y espiritual. Y es una bendición porque es la expresión visible de un vínculo más profundo: ¡el de Cristo con su iglesia! “… El hombre… se unirá a su esposa, y los dos llegarán a ser un solo cuerpo. Esto es un misterio profundo; yo me refiero a Cristo y a la iglesia, Efesios 5:31-32 (NVI). 

Para que el matrimonio funcione debe haber un compromiso total entre los esposos de ser fieles entre sí: “¿Por qué enredarte… con la mujer ajena? ¿Por qué arrojarte en brazos de una extraña?”, Proverbios 5:20 (DHH). El sexo es un bien preciado solo para ser compartido entre los esposos. No es para que lo dejemos en las calles y con cualquier persona que se atraviesa: “¡Guarda tu amor sólo para ella! ¡No se lo des a ninguna otra! No compartas con nadie el gozo de tu matrimonio… ¿Para qué derramar por las calles el agua de tus manantiales teniendo sexo con cualquiera?”, Proverbios 5:16-17 (TLA, NTV). Por eso la fidelidad y exclusividad entre los esposos representa la fidelidad y la exclusividad en nuestra relación con Dios. El adulterio espiritual es aborrecido por Dios, Éxodo 20:3. Dios quiere con su pueblo una relación de compromiso exclusivo. Entonces cuando los esposos son fieles entre sí el matrimonio es bendecido y Dios es glorificado. Como verás la Biblia no habla de manera negativa acerca de la sexualidad. Si alguien piensa que el cristianismo está en contra del sexo ¡que lea Proverbios 5! 

Observa cómo termina proverbios 5: “Nuestros caminos están a la vista del Señor; él examina todas nuestras sendas. Al malvado lo atrapan sus malas obras; las cuerdas de su pecado lo aprisionan. Morirá por su falta de disciplina; perecerá por su gran insensatez”, Proverbios 5:21-23 (BAD). El sexo tiene mucho poder, ¡poder para hacer bien o poder para hacer mal! “Al malvado lo atrapan… su pecado lo aprisiona”, Proverbios 5:22 (BAD). Se mencionan palabras como “atrapan” y “aprisionan” en el tema del sexo. Atentar contra el sexto mandamiento te cautiva, aprisiona, esclaviza, domina y finalmente te lleva a la muerte: “morirá”, Proverbios 5:23 (BAD). 

En el sexo nadie es neutral: o somos libres o somos esclavos. Nadie está en el medio. Eres esclavo practicando sexualidad fuera del matrimonio o eres libre disfrutándolo en el matrimonio. No tienes por qué dejarte atrapar y caer en la jaula del diablo. Sé libre y vive en libertad. Y ¿qué necesitamos para guardar los mandamientos de Dios? Su gracia: “Dios ha manifestado a toda la humanidad su gracia, la cual… nos enseña a rechazar la impiedad y las pasiones mundanas. Así podremos vivir en este mundo con… dominio propio, Tito 2:11-12 (NVI). La única cosa que nos hace rechazar las pasiones mundanas es su gracia. Lo único que nos hace tener dominio propio es su gracia. En nuestras propias fuerzas no lo lograremos pero Su manifiesta presencia obrando en nosotros sí. ¡Su gracia lo es todo! 

¡La santidad nos da acceso a la presencia de Dios! Tu campamento debe ser un lugar santo; si el Señor ve algo indecente, se apartará de ti, Deuteronomio 23:14 (BAD). El que quiera tener acceso a Dios y a sus bendiciones tendrá que apartarse del pecado y de su nefasta influencia consagrándose para Dios y sus propósitos. Los creyentes han perdido su impacto porque han perdido su santidad. ¡La iglesia tiene muy poca influencia en la sociedad porque la sociedad tiene gran influencia en la iglesia! Piensa en tu noviazgo. ¿Le da gloria a Dios? ¿Y qué me dices de tu matrimonio? ¿Es santo? ¿Existe algo indecente en tu dormitorio, en tu computadora o en tu biblioteca? ¿Sigues pensando que el matrimonio es una institución sagrada o ya coqueteas con la idea del divorcio? La confusión moral es tal que hay un nuevo orden moral en las familias: ¡a la cloaca con los votos matrimoniales! ¿Has coqueteado con la posibilidad de la infidelidad? ¿Has aceptado la idea de que “mereces algo mejor”? ¿Qué está pasando? La gente se casa para divorciarse y se divorcia para casarse. El divorcio no es la voluntad de Dios. “¡Pues yo odio el divorcio!”, dice el SEÑOR…”, Malaquías 2:16 (NTV). “… Moisés permitió el divorcio sólo como una concesión ante la dureza del corazón… pero no fue la intención original de Dios, Mateo 19:8 (NTV). Que nadie escoja este camino hasta que se haya intentado todo lo que pueda para una restauración. Ningún detalle de la vida diaria es demasiado pequeño para escapar a esta regla de la santidad. Si Dios tiene cuidado de nuestros cabellos, es lógico que aun nuestros cabellos traigan honra a su nombre santo.  

Oración. “Señor, soy consciente que necesito un encuentro contigo que me transforme para siempre. Pido que en tu misericordia me reveles los pecados que debo confesar. No quiero tener cuentas pendientes. Decido ponerle fin a mi vieja vida de pecado y emprender un nuevo comienzo de obediencia a Dios. Santifica todo mi ser. Quiero ser una persona usada poderosamente por ti y sé que para eso Jesucristo debe ser el Señor de mi vida sexual. Me consagro y consagro todo mi cuerpo. Entiendo que tú eres el único que puedes librarme de las garras del pecado. Solo tú puedes hacerme libre. Asumo la responsabilidad de hacer que tu ocupes un lugar en mi vida muy distinto del que has ocupado hasta hoy. Tú serás los primero y en ti confío mi vida. Amen”.