Tu futuro está profetizado 10/7/2022 #1204

Episode 215,   Jul 10, 2022, 08:30 PM

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Pastor José Luis Cinalli
10/7/2022
Tu futuro está profetizado

Jesús dijo: “… Las Escrituras… testifican acerca de mí...”, Juan 5:39 (Peshita Español).

En la Biblia existen cientos de profecías acerca de Jesús que ya se cumplieron: su madre sería virgen, Isaías 7:14; Mateo 1:18. Nacería en Belén, Miqueas 5:2; Mateo 2:1. Tendría un precursor, Mateo 11:20. Viviría en Egipto, Mateo 2:13-15; Oseas 11:1. Desarrollaría parte de su ministerio en Galilea, Isaías 9:1-2; Mateo 4:12-13. Sería traicionado, Salmo 41:9; Juan 13:18. Pagarían treinta piezas de plata al entregarlo, Zacarías 11:12; Mateo 26:15. Entraría a Jerusalén montado en un burrito, Zacarías 9:9; Mateo 21:5. Sería odiado (Salmo 69:4; Juan 15:24) y acusado por falsos testigos, Salmo 27:12; Mateo 26:60. Lo golpearían, Isaías 50:6; Mateo 27:26. Sería enjuiciado sin defenderse, Isaías 53:7; Mateo 27:12. Echarían suerte por sus ropas, Salmo 22:18; Lucas 23:34. Moriría por el pecado de la humanidad, Isaías 53:9-12; 1ª Pedro 3:18. Le darían a beber vino agrio, Salmo 69:21; Mateo 27:34. Atravesarían sus manos y sus pies, Salmo 22:16; Mateo 27:35. Sería crucificado entre criminales, Isaías 53:12; Lucas 23:32-33. Se burlarían de Él, Salmo 22:7; Mateo 27:39. No le romperían hueso alguno, Salmo 34:20; Juan 19:33. Sería herido en el costado, Zacarías 12:10; Juan 19:34. Lo sepultarían en una tumba de ricos, Isaías 53:9; Mateo 27:57-60. Resucitaría al tercer día, Salmo 16:10; Hechos 2:25-27. Ascendería al cielo, Salmo 68:18; Marcos 16:19. Sería exaltado a la derecha de Dios, Salmo 110:1; Hechos 2:33. 

Algunas profecías acerca de Jesús se están cumpliendo, como aquella que dice: “… En todas las naciones se hablará de mí…”, Lucas 24:47 (TLA). Sin embargo; muchas están a la espera de su cumplimiento, como su segunda venida. Jesús dijo: “Vengo pronto”, Apocalipsis 22:20 (PDT). Jesús prometió regresar por su iglesia: “Hay muchos lugares en la casa de mi Padre... voy a prepararles un lugar y... regresaré. Los llevaré conmigo para que estén donde estoy yo, Juan 14:2-3 (PDT). “No... los abandonaré ni los dejaré como huérfanos en medio de la tormenta. Vendré a ustedes, Juan 14:18 (NT-BAD). ¡Qué consuelo maravilloso! Jesús prometió preparar un lugar y, luego, buscarnos para que estemos con Él por toda la eternidad. Esa será nuestra mayor recompensa, aunque habrá más. ¡Seremos recompensados por cada buena obra! “... Un día tendremos que comparecer ante el tribunal de Cristo…. Cada uno recibirá lo que merezca por las buenas o las malas cosas que haya hecho mientras estaba en el cuerpo terrenal”, 2ª Corintios 5:10 (NT-BAD).

Todas las personas serán juzgadas por Jesús. Los cristianos comparecerán ante el tribunal de Cristo y, los incrédulos, en el gran trono blanco. Para los creyentes el juicio no resolverá su destino eterno sino, la recompensa por sus obras. No se juzgarán sus pecados ni su salvación. Se evaluará el servicio y se decidirá si serán premiados y en qué medida. Entiéndase bien. La salvación no es por obras sino por fe, Efesios 2:8. Pero una vez salvos, el Señor evalúa nuestras obras para premiarnos o castigarnos. ¿Y qué pasará con los incrédulos? Serán condenados: “Cuando… Jesús venga... castigará a los que no... quieren reconocerlo, y los destruirá para siempre...”, 2ª Tesalonicenses 1:7-9 (TLA). En definitiva, Dios prometió un tribunal de recompensa para los creyentes y un juicio de condenación para los incrédulos. Y Dios siempre cumple sus promesas…”, 1ª Corintios 1:9 (PDT).  

¿Qué otras profecías no se han cumplido todavía? ¡La resurrección de los muertos! Jesús aseguró que todos los muertos resucitarán, pero no todos irán al mismo lugar. Los creyentes irán al cielo: “… Dios hará que todos aquellos que murieron y que creían en Jesús resuciten para estar con él, 1ª Tesalonicenses 4:14 (PDT); Juan 6:39-40; 2ª Corintios 4:14. Los incrédulos, en cambio, irán al infierno: “... Los muertos oirán mi voz y saldrán de sus tumbas. Entonces… los que hicieron lo malo volverán a vivir para ser castigados, Juan 5:28-29 (TLA). “… Recibirán un castigo interminable, pero los que obedecen a Dios recibirán la vida eterna”, Mateo 25:46 (TLA). La venida del Señor será la grandiosa noticia para quienes creyeron en Dios; en cambio, para quienes lo rechazaron será “un día de terrible oscuridad... un día de terrible tristeza”, Amós 5:18-20 (TLA). Si mueres hoy, ¿a dónde irás a pasar la eternidad? Preocuparse solo por el día de hoy y no pensar en el destino eterno es una tragedia. El cielo no es el destino automático del ser humano. La gente pasa a una mejor vida si trata con el asunto del pecado en la cruz de Cristo. De lo contrario, se va al infierno para siempre. Y la eternidad es mucho tiempo para estar en ese horrible lugar, ¿no te parece?

El testimonio más fiel de que las personas que no creen en Dios vivirán en el infierno es Jesús, quien le dijo a los fariseos: “... Adonde yo voy, ustedes no pueden ir, Juan 8:21 (NTV). Sin embargo, a los discípulos les dijo: “Allá donde vive mi Padre hay muchas moradas y voy a prepararlas para cuando vayan... para que estén siempre donde yo esté...”, Juan 14:2-3 (NT-BAD). Evidentemente existe un lugar para los que creen en Jesús y otro muy diferente para los que no creen. Y el lugar para los que no creen es el infierno: “… A los malvados... Lo único que pueden esperar de Dios es castigo. Váyanse al fuego que nunca se apaga..., Mateo 25:41 (TLA). Jesús dijo que el infierno es un lugar de tormentos: “… En aquel lugar el fuego nunca termina... Allí los gusanos que se comen el cuerpo no mueren nunca y el fuego jamás se apaga”, Marcos 9:43-48 (PDT). Un fuego que no se apaga nunca y un gusano que no muere y que consume un cuerpo que no puede ser consumido. ¡Qué imágenes tan terroríficas!

Cuidado con menospreciar estas profecías bíblicas, máxime si consideramos que todo lo que se dijo antes se cumplió. Tienes la posibilidad de escapar de ese horrible lugar de tormentos si, arrepentido, te vuelves de todo corazón a Dios reconociendo a Jesús como el Señor y Salvador de tu vida. “Dios... nos ha dado vida eterna, y... tendremos esa vida si creemos en su Hijo, 1ª Juan 5:11 (TLA). “Porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su único Hijo para que todo aquel que en El cree no se pierda, más tenga vida eterna... a aquellos que han depositado en Él sus esperanzas de salvación no les espera ninguna condenación eterna. Pero aquellos que no creen en El ya están condenados...”, Juan 3:16-18 (NT-BAD). No existen excusas. Solo el que quiera irá al infierno. ¿Cuál será tu decisión? ¿Eterna perdición en el lago de fuego con Satanás o, salvación eterna en el cielo con Cristo y su iglesia?

Una reflexión final. Jesús dijo: “Vengo pronto, y traigo la recompensa conmigo…”, Apocalipsis 22:12 (NTV). Hay recompensa para los obedientes: “Los que te obedecen serán recompensados”, Salmo 19:11 (PDT). “… Hay recompensa para los que viven para Dios…”, Salmo 58:11 (NTV). Hay recompensa para los que sufren por seguir a Jesús: “Cuando la gente los insulte, los persiga y hable mal de ustedes por seguirme… Dios les va a dar una gran recompensa…”, Mateo 5:11-12 (PDT). Recompensa por hacer el bien: “Cuando le des algo a un necesitado… recibirás recompensa…”, Mateo 6:3-4 (PDT). Recompensa para el que ora: “Cuando ores… tu Padre… te recompensará”, Mateo 6:6 (NTV). Recompensa para el que ayuna: “… Cuando ayunes… tu Padre… te recompensará…”, Mateo 6:17-18 (NTV). Recompensa por dar un vaso de agua: “Si le dan… un vaso de agua fresca a uno de mis seguidores más insignificantes, les aseguro que recibirán una recompensa”, Mateo 10:42 (NTV). Recompensa por amar a los enemigos: “¡Amen a sus enemigos!... Entonces su recompensa… será grande…”, Lucas 6:35 (NTV). Recompensa por confiar en Dios: “No desechen la firme confianza que tienen en el Señor. ¡Tengan presente la gran recompensa que les traerá!”, Hebreos 10:35 (NTV). Recompensa por servir a Dios: “Ellos serán mis preferidos… Y los premiaré…, Malaquías 3:17 (BLA). “Dios… no olvidará con cuánto esfuerzo han trabajado para él y cómo han demostrado su amor por él sirviendo…”, Hebreos 6:10 (NTV). “…Trabajen… para el Señor con entusiasmo, porque… nada de lo que hacen para el Señor es inútil, 1ª Corintios 15:58 (NTV). “… Tengan ánimo y no desmayen, esfuércense y que no se debiliten los brazos… porque sus trabajos tendrán recompensa, 2º Crónicas 15:7 (BL95 y PDT). “No nos cansemos, pues, de hacer el bien; porque si lo hacemos… cosecharemos ricas bendiciones, Gálatas 6:9 (NT-BAD). Recompensa para los que esperan en Dios: “… Tengan… paciencia hasta que el Señor vuelva. Sean como el labrador que, paciente, espera… para recoger los frutos de su trabajo. Sí, sean pacientes. ¡Animo, que la venida del Señor está cerca!”, Santiago 5:7-8 (NT-BAD). Recuerda que el bien que hagas “Jehová te lo pagará” (Proverbios 25:22) y que llegará el día en que Jesús mismo será quien te dé las gracias y la recompensa por el servicio que le hayas prestado.